Un estudio elaborado por la Cátedra de Sostenibilidad del IEB Universitat de Barcelona ha arrojado información sobre los perfiles que demandan las empresas energéticas en ámbitos como el hidrógeno o la rehabilitación sostenible. El informe coloca a España como el segundo país europeo con mayor demanda de profesionales energéticos.
España es el segundo país europeo con mayor demanda de profesionales energéticos, solo detrás de Alemania, y seguido de Francia, Reino Unido e Italia. Esta es una de las principales conclusiones de un interesante estudio elaborado por la Cátedra de Sostenibilidad Energética del IEB – Universitat de Barcelona, que también ha arrojado información sobre los principales perfiles profesionales que demandan actualmente las empresas energéticas.
Durante la presentación del estudio, su directora, María Teresa Costa, destacó que la “profunda” transformación que está viviendo el sector energético “va a dar lugar a nuevos perfiles profesionales como los gestores de demanda eléctrica producida por los nuevos agentes de mercado o nuevos profesionales con una base tecnológica fuerte y con capacidad de análisis de datos”.
Los perfiles profesionales, por sectores
La directora del estudio resaltó otros nuevos perfiles profesionales que está impulsando el nuevo escenario tecnológico como técnicos en proyectos de energías renovables, especialistas en redes eléctricas en parques eólicos, en sistemas fotovoltaicos, ingenieros de diseño o expertos en contratos de suministro de energía.
En el sector del hidrógeno, la digitalización de las redes está dando lugar también a profesiones emergentes como la de desarrollador de proyectos de hidrógeno verde, de diseño de redes eléctricas inteligentes o especialista en integración de tecnologías de almacenamiento.
Por su parte, en el ámbito de la edificación y la rehabilitación sostenible, también se perfilan nuevas profesiones como los instaladores de soluciones tecnológicas avanzadas o gestores de modelización de información para la edificación, especialistas en renovación profunda de edificios…
En este sentido, cabe recordar que las medidas adoptadas por el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) llevan asociadas un aumento neto del empleo de entre 253.000 y 348.000 puestos al año durante el período 2021-2030.
El estudio también ha puesto de manifiesto las carencias de la formación reglada actual para los expertos del sector y la necesidad de actualizar contenidos para adaptarlos al nuevo conjunto de “habilidades necesarias para hacer frente a los cambios”, y también ha detectado “la baja presencia de la mujer en el sector energético”.
Los riesgos del proceso de cambio
La transición hacia este modelo energético verde constituye una oportunidad, pero también conlleva riesgos para algunos profesionales. Entre los colectivos más afectados, el informe indentifica a los trabajadores con bajos niveles formativos y de competencias, o a las personas con reducidas competencias númericas o en áreas STEM.
Además, el estudio también pone de relieve la dependencia de algunas localidades de sus instalaciones energéticas, que se están desmantelando como consecuencia de la Agenda Verde 2050.
Por último, el informe señala la importancia de que las administraciones puedan estrechar lazos entre los centros educativos y el mercado laboral, y de que las empresas apuesten por mejorar el reciclaje de los profesionales y reforzar la Formación Profesional Dual.
El estudio, que fue presentado en una jornada sobre transición energética y empleo organizada por Naturgy, ha sido elaborado a partir de las opiniones de expertos del sector y del análisis de 12.000 ofertas de trabajo de todos los países del mundo.
Fuente: Cuadernos de Material Eléctrico