Apagar la calefacción por la noche puede ahorrar 16 veces más que cambiar todas las bombillas a LED en el hogar. Estos cálculos son para una vivienda media en Madrid (donde se usan mayoritariamente calderas de GLP, gasóleo o gas natural). El ahorro en calefacción puede ser aún mayor en casas más grandes, más antiguas o en provincias más frías o con otras calefacciones.
¿En el transporte, cuál de estas medidas es más efectiva para ahorrar?
En caso de utilizar normalmente un automóvil de combustión para desplazarse dentro de un mismo municipio (unos 12 kilómetros), tres días de teletrabajo suponen un mayor ahorro que usar un coche eléctrico o el transporte público. Aunque si se mide en emisiones, se logra una mayor reducción con el transporte público (243 kg CO2 / año) que con el teletrabajo (218 kg CO2 / año).
¿En la cocina, cuál de estas medidas supone un mayor ahorro?
En un hogar medio en el que vivan dos personas, cocinar de forma más eficiente, tapando las ollas y ajustándolas al diámetro de los fogones, permite ahorrar 2,6 veces más que usar el microondas en lugar del horno (cuando el tipo de cocinado lo permita) y cuatro veces más que apagar el frigorífico en vacaciones.
Todas estas acciones contribuyen a reducir la factura de energía en los hogares, pero algunas ahorran más que otras y el resultado puede ser muy distinto según la situación geográfica o el perfil de consumo de cada ciudadano. Para identificar las mejores medidas de ahorro de forma personalizada, EL PAÍS ha diseñado, en colaboración con el Instituto de Investigación Tecnológica (IIT) de la Universidad Pontificia Comillas (Madrid), esta herramienta que estima cuánto se puede ahorrar con cada acción a partir de los datos introducidos de un hogar concreto.
Hogar
Ahorro
- Apagar la calefacción por la noche: 344 €
- Bajar un grado el termostato: 172 €
- Secar la ropa al aire libre: 92 €
- Llenar la lavadora y lavar en frío: 92 €
- Cocinar eficientemente, ajustando el diámetro de los recipientes a las ollas y tapándolas: 60 €
- Usar microondas en lugar del horno: 23 €
- Bajar 10 grados la temperatura de consigna del agua caliente sanitaria: 21 €
- Apagar el frigorífico durante las vacaciones: 15 €
Medidas con inversión
Ahorro anual por hogar
Ahorro
- Instalación de bomba de calor: 527 €
- Aislamiento en muros: 411 €
- Sustitución de electrodomésticos de mayor consumo (frigorífico, lavadora y cocina): 296 €
- Sustitución de ventanas (vidrios y carpintería): 136 €
- Sellado de ventanas (burletes): 83 €
- Uso de regletas para evitar el consumo fantasma: 63 €
- Sustitución de bombillas antiguas por LED: 22 €
Con los últimos datos introducidos en la herramienta, el ahorro potencial del conjunto de las medidas sin inversión en la vivienda es de 647 euros anuales si se opta por apagar la calefacción por la noche o de 475 euros en el caso de preferir bajar un grado el termostato.
Según Roberto Barrella, investigador del IIT, “aunque depende mucho de la ubicación geográfica, por lo general, donde más se puede ahorrar en una vivienda es en la calefacción, y después en la sustitución de electrodomésticos si son antiguos”. En lo que respecta a las medidas que requieren invertir dinero de forma previa, la instalación de una bomba de calor, por ejemplo, en un piso de antigüedad y tamaño medio en Bilbao (que supone una inversión media de unos 3.000 euros) permite un ahorro en la factura energética anual de 427 euros, el cambio de electrodomésticos (con una inversión estimada en unos 1.210 euros para la compra de frigorífico, lavadora y cocina de inducción más eficientes) representa una reducción de 296 euros al año y la sustitución de ventanas (con una inversión de unos 1.680 euros) logra una bajada de 101 euros al año.
Transporte
Medidas con inversión
Ahorro anual por persona
Ahorro Emisiones
- Micromovilidad: patinetes, bicis eléctricas…: 407 € y 356 kg CO2
- Cambio a coche 100% eléctrico pequeño: 232 € y 192 kg CO2
- Cambio a coche 100% eléctrico del mismo tamaño que tenía: 225 € y 183 kg CO2
- Cambio a coche híbrido pequeño: 135 € y 79 kg CO2
- Cambio a coche híbrido del mismo tamaño que tenía: 123 € y 65 kg CO2
En lo que se refiere al transporte, obviamente, el mayor ahorro se consigue pasándose a la movilidad activa, es decir, caminar o pedalear encima de una bici. No obstante, existe una gran cantidad de alternativas para reducir el consumo de energía ajustándose a las necesidades de cada uno. Como incide Manuel Pérez, también investigador del IIT, “en la movilidad cotidiana, algunas de las medidas más efectivas e inmediatas no requieren de inversión, sino de un cambio de hábito”.
Así, por ejemplo, una persona acostumbrada a desplazarse en automóvil de combustión dentro de un mismo municipio puede ahorrar al año 206 euros y 181 kilos de CO₂ si comparte coche, mucho más que conduciendo de forma eficiente (62 euros y 54 kilos de CO₂) e incluso más que comprando un auto híbrido (123-135 euros y 65-79 kilos de CO₂).
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Fuente: El País