El 31 de diciembre expira la ayuda para carburantes puesta en marcha por el Gobierno

Un mes. Ese es el periodo de tiempo que le queda a la ayuda para carburantes puesta en marcha por el Gobierno. El descuento de los 20 céntimos por litro permanecerá vigente hasta el 31 de diciembre.

La vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, ha asegurado que el Gobierno baraja distintas opciones para cuando expire la ayuda para carburantes. Una de ellas consiste en mantener el descuento, aunque solo para algunos sectores.

Uno de los sectores que podría verse beneficiado de la prórroga de la ayuda para carburantes es el sector de los transportistas o, por ejemplo, las familias con rentas muy bajas. Así lo indicó la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, que indicó que el Ejecutivo sería “sensible” con los sectores más afectados, como el de los transportistas.

Para el trabajador autónomo, este tipo de rebajas en un coste fijo como son los carburantes, supone un alivio en la factura de combustible mensual. Esto hace que todos los trabajadores autónomos esperan que esta medida se prolongue también a 2023, especialmente debido a que la guerra en Ucrania no parece tener un final próximo.

Rebaja en gasolineras

Por parte de las gasolineras, cuando el Gobierno puso en marcha las ayudas al combustible, algunas como Repsol, Cepsa y BP decidieron sumar entre 5 y 10 euros a todos los conductores que utilizaran su tarjeta al repostar. Repsol, por ejemplo, optó por bonificar con 39 céntimos a los conductores que emplearan su tarjeta. Por lo tanto, los expertos aconsejan esperar para conocer la decisión que toman las gasolineras una vez que el Gobierno anuncie las nuevas medidas.

A lo largo de este año, el precio de los carburantes ha alcanzado máximos históricos y en varias ocasiones han llegado a costar más de dos euros por litro de combustible. Es el caso de la gasolina Sin Plomo 95, el precio ha alcanzado a lo largo de este año los 2,15 euros/litro, con un crecimiento más acelerado que el del gasóleo.

Fuente: Rocío González-Cinco Días